martes, 21 de julio de 2009

Te tuve entre mis manos.

¡¡¡Estoy harta, eres un imbécil...!!! ¿qué no me puedes preguntar? para que lo sepas de una vez, imbécil, que aquí mando yo y que este es mi barrio. Mucho antes de que tú vinieras ya estaba yo. Te lo expliqué en su momento. ¡¡¡Qué me lo preguntes a mí antes!!!.

Él no decía nada, de vez en cuando musitaba algo parecido a:
que no me insultes, que bueno, que...te vas a acordar. Seguía con la mirada sobre las cartas. Ya casi estábamos recogiendo y preparando el carro para marchar. Y ella
con su soniquete percutor, una y otra vez, una y otra vez(ñiqui, ñiqui, ñiqui).

Entonces, sin darnos cuenta, la coge del cuello.
Entre sus manos. La adrenalina se le ha disparado, se le ha turbado la mente, no sabe lo que está haciendo.

Los compañeros acuden al inaudito caso del repentino "que te mato, que me has hinchado la mente y estoy que exploto".

Hace tiempo que las cosas no iban bien. Hacíamos burlesca de su manera de relacionarse con nosotras. Hoy lo he presenciado.

Ahora sé por qué me parecía tan uraño. Es muy joven pero no ha podido aguantar la cantinela de su compañera de barrio.

LALOLADixit. Distrito 35 c/Arenys.

No hay comentarios: